Hay que tener en cuenta que los muebles van a sufrir las vibraciones del movimiento del vehículo en circulación, el cambio de temperaturas, la humedad del ambiente, así como el propio desgaste por el uso. Por ello, hay que asegurarse de que sean resistentes y seguros. Como siempre, se trata del equilibro perfecto entre peso, funcionalidad y resistencia.
El mejor contrachapado es el de pino, fácil de trabajar pero muy resistente. Lo puedes comprar con tratamientos especiales anti humedad e ignífugo: contrachapado fenólico o marino. También muy recomendable el contrachapado de abedul o de okume. Sin embargo, el contrachapado de chopo, aunque resulta muy económico, no lo recomendamos porque es demasiado blando.
Así mismo, existen diferentes tipos de acabados camper. Si elegimos madera sin tratar y sin acabado, deberemos dárselo nosotros posteriormente y a nuestro gusto, algo muy común en una camperización casera.
Seguimos con las tablas prácticas y, esta vez, hablamos de la madera necesaria y/o recomendada para fabricar tus muebles camper: